A las 12 del mediodía es habitual el rezo del Ángelus a la Virgen María. Para el tiempo de Pascua (desde la Resurrección del Señor hasta el día de Pentecostés), Benedicto XIV estableció, en 1742, que se sustituyera el rezo del Ángelus por la antífona "Regina Coeli".
Hoy incluimos aquí este rezo para que cada día, con alegría, miremos a nuestra Madre del Dulce Nombre de María, felicitándola por la resurrección de su Hijo.
Reina del cielo, alégrate, aleluya.
Porque el Señor, a quien has merecido
levar en tu seno, aleluya.
Ha resucitado según su palabra, aleluya.
Ruega al Señor por nosotros, aleluya.
Goza y alégrate, Virgen María, aleluya.
Porque en verdad ha resucitado el Señor, aleluya.
Oremos:
Oh Dios, que por la resurrección de Tu Hijo,
Nuestro Señor Jesucristo,
has llenado el mundo de alegría, concédenos,
por intercesión de su Madre, la Virgen María,
llegar a alcanzar los gozos eternos.
Por Jesucristo Nuestro Señor. Amen.