Un año más, casi sin darnos cuenta, se acerca el Miércoles de Ceniza y nuestra Parroquia se une a la Iglesia Universal para dar comienzo a la Cuaresma: el período de 40 días dedicado a la oración, al ayuno y a la limosna como preparación para celebrar la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo.
Y como es costumbre, lo celebraremos con el rito de la imposición de la ceniza: los niños y jóvenes de Catequesis de Iniciación Cristiana se darán cita con sus catequistas a las 17’00 horas para participar en este rito de la ceniza, y a las 19’00 horas celebraremos la Santa Misa para el resto de la comunidad.
El rito de la imposición de la ceniza en la cabeza de los fieles mientras el sacerdote dice “Conviértete y cree en el Evangelio” simboliza a la vez el pecado y la fragilidad del hombre. Cubrirse de cenizas significa, según ritos antiguos, hacer un reconocimiento público por el cual nos declaramos frágiles, incapaces, pecadores, en busca de la misericordia de Dios.
Demos comienzo a la Cuaresma escuchando y leyendo el Evangelio, meditándolo para creer en él y con ello convertir nuestra vida, siguiendo las palabras del Evangelio y evangelizando, es decir transmitiendo su mensaje con nuestras acciones y nuestras palabras.