Estamos a mediados del mes de Diciembre, el mes en el que se dan lugar muchas obras benéficas de recogidas de alimentos y juguetes para los más necesitados, el mes en el que nuestras calles se llenan de luces, el mes de coger algunos kilos de más por culpa de los exquisitos dulces típicos navideños, y el mes de los villancicos, ese cante navideño de nuestra tierra dedicado al nacimiento del Señor. Los villancicos son música, y la música es el tema al que hoy dedicamos nuestra entrevista mensual para conocer al coro parroquial de Santa Cruz “a fondo”.
El coro de la Parroquia de Santa Cruz de Lora del Río dio sus primeros pasos allá por el año 1989 estando formado por diferentes fieles de la parroquia de los que hoy, por distintas circunstancias, sólo se mantiene una persona. A lo largo de estos más de 25 años se han ido incorporando otras personas que han dado lugar al actual grupo formado por 11 miembros (diez mujeres y un hombre). Dña. Alba Iglesias y el ya sacerdote D. Alfonso Peña fueron algunos de los que dirigieron el coro años atrás. Hoy es Dña. Concepción Duque quien dirige y coordina el grupo.
Dos veces por semana ensaya el coro las distintas canciones con las que enriquecen cada celebración litúrgica. Estos ensayos tienen como objetivo expresar en los distintos tiempos litúrgicos los sentimientos que, a veces, las palabras no llegan a expresar. Los integrantes del coro intentan igualmente hacer comunidad pues, según nos afirman en esta entrevista, el cantar en común toda la asamblea une a las personas entre sí creando un clima festivo y solemne. Dña. Concepción Duque considera que el canto en las celebraciones litúrgicas es esencial y no un mero adorno. El canto es oración hecha música, y así lo manifestó San Agustín cuando pronunció la famosa cita de “cantar es orar dos veces”.
Alegría, amistad y convivencia entre personas que no se conocían antes de entrar en el coro son los beneficios personales que nos cuentan que este grupo parroquial aporta a sus componentes, creando una pequeña gran familia. Nos detallan que el día a día en el coro es una experiencia muy enriquecedora en la que frecuentemente cada componente aprende con las vivencias de sus compañeros.
Dña. Concepción hace una invitación a toda aquella persona que, como se ha dicho anteriormente, quiera rezar cantando, siendo muy importante aquella persona que pudiera aportar su tiempo tocando algún instrumento para acompañar las voces. Con esto se daría solución a la principal dificultad con la que el coro se enfrenta, que es la de conseguir instrumentos que se unan al coro (guitarra, órgano…). Pese a esta dificultad, el coro parroquial está ilusionado en seguir trabajando para que no falte el canto en las celebraciones litúrgicas y mejorar también progresivamente en función de las posibilidades del grupo.
Los integrantes del coro colaboran también en otros grupos parroquiales: catequesis para adultos, limpieza del templo, Cáritas parroquial y cuidado del jardín. Es en estos grupos donde reciben formación por parte de los sacerdotes, al igual de todo lo que reciben de su participación en la lectio divina y de cuantas actividades desarrolla la parroquia.
En definitiva, los componentes del coro parroquial confiesan sentirse encantados con la labor que desempeñan en la parroquia, por su participación en todas las actividades que se llevan a cabo y por la armonía propia del grupo.
Agradecemos al coro parroquial su participación en esta entrevista en la que hemos conocido “a fondo” su día a día en la función del canto en las celebraciones litúrgicas y pedimos a Dios que les conceda lo que más necesiten.