LA PARROQUIA DE SANTA CRUZ EN EL TIEMPO DE PASCUA

jueves, 16 de julio de 2020

ORIGEN Y CURIOSIDADES SOBRE LA VIRGEN DEL CARMEN

El 16 de julio se celebra la festividad de la Virgen del Carmen, patrona de pescadores y marineros y numerosos pueblos, ciudades y barrios de nuestra geografía se vuelcan con la advocación. La costa se llena de procesiones en las que cientos de fieles acompañan a su Virgen hasta las aguas. En algunos lugares la introducen en el mar, en otros la pasean por la orilla y en muchos, la embarcan.

Sobre sus orígenes, en el Primer Libro de los Reyes, se habla del profeta Elías, de la gran sequía que sufría el país y de los sacrificios ofrecidos en el Monte Carmelo. Fue entonces que Elías prometió a Dios que el rey Ajaab y el pueblo abandonarían al dios Baal para que Él terminara con la sequía que asolaba a la región. Después de varias veces que Elías subió al monte, apareció una gran señal: "Cuando volvió la séptima vez, subía desde el mar una nubecita no más grande que la palma de la mano" (1 Rey 18,44).

A partir de entonces el Monte Carmelo (ubicado al oeste del lago Galileo y cuyo nombre significa jardín) se convirtió en un lugar sagrado, hasta donde llegaron a vivir ermitaños que se dedicaban a rezar y que con el paso de los siglos fueron llamados carmelitas. Así, se decidió instalar y edificar la primera iglesia dedicada a Santa María del Monte Carmelo. Su devoción por la Virgen hizo florecer una nueva advocación: Nuestra Señora del Carmen. Más tarde, Simón Stock, Superior de esta orden al verla en peligro, le pidió a la Virgen del Carmen una señal de su protección. Precisamente, un 16 de julio la Señora se le apareció con un escapulario, cumpliendo así sus plegarias.

Pero, ¿por qué es la patrona de los marineros? Todo apunta a que en la Edad Media se creía que María significaba ‘estrella del mar’, en latín ‘Stella Maris’. Más tarde, en el siglo XVIII, un almirante mallorquín popularizó su celebración entre la marinería que él dirigía. Desde este momento, la marina española fue encomendándose a la Virgen del Carmen, también patrona de pescadores.

El escapulario está reconocido por la Iglesia como un sacramental: un signo que ayuda a vivir cristianamente. Ni es un amuleto que asegura la salvación, ni comunica las gracias propias de los sacramentos, pero dispone al amor de Dios. Consiste en una tira con una abertura por donde se mete la cabeza y que cuelga sobre el pecho y la espalda, pendiente de los hombros (en latín, scapula). Es parte del traje de faena usado por los monjes benedictinos entre otros y tiene tres significados: amor y protección maternal de la Virgen, la pertenencia a María y el suave yugo de Cristo que la Virgen ayuda a llevar.

Este regalo de la Virgen empezó siendo sólo para los religiosos, y poco a poco se fue extendiendo también entre los laicos. Según san Alfonso María de Ligorio, "así como los hombres se enorgullecen de que otros usen su uniforme, así Nuestra Señora Madre María está satisfecha cuando sus servidores usan su escapulario como prueba de que se han dedicado a su servicio y son miembros de la familia de la Madre de Dios".

Es innegable que esta festividad es una de las que más fervor despierta. Tanto es así, que los fieles de la Virgen del Carmen tienen sus propias creencias, algunas de ellas ligadas al momento del fallecimiento. Se dice que si una persona lleva toda su vida su escapulario, ella vendrá a recogerla y llevarla al Cielo, librando así al fallecido del Purgatorio. Otra de las tradiciones más conocidas para ayudar al moribundo a hacer el tránsito, es poner un azulejo o ladrillo en los pies de la persona a punto de perecerAntiguamente existía también la tradición de esperar al primer baño de verano hasta que el mar fuese bendecido por la Virgen del Carmen.